Entrenamiento integrado

 

Cuando las personas hablan de entrenamiento integrado, tienen más o menos claro el concepto, pero no siempre lo aplican.

Si buscas definiciones de entrenamiento integrado en el deporte puedes encontrar cosas como la siguiente: “el entrenamiento integrado es la preparación integral física-técnica-táctica consistente en favorecer el desarrollo de las cualidades en el contexto en que intervienen en competición”.

Pero no todas las personas tienen la fortuna de tener formación en las áreas física, técnica y táctica de su deporte a la vez. A esto se suma las dudas que pueda tener el técnico, como decíamos anteriormente, a la hora de llevarlo a la práctica ya que se necesita ser un verdadero experto en estas materias.

Hace más de 20 años ya se hablaba del entrenamiento integrado, pero lo que se hacía básicamente era introducir, por ejemplo, en el fútbol el balón en el trabajo físico. Afortunadamente se ha evolucionado y hay grandes profesionales, tanto en equipos de élite como en equipos amateurs, que estando bien formados saben aplicar los conceptos en la práctica del entrenamiento integrando la preparación física, la preparación técnica y la preparación táctica.

Como siempre todo esto evoluciona y actualmente si se quiere llevar a cabo un entrenamiento integrado hay algunos elementos más que se deberían considerar para trabajar junto con lo físico, lo técnico y lo táctico.

El primero de ellos es el entrenamiento cognitivo. Normalmente en cada deporte se trabaja el aspecto cognitivo al hacer el propio entrenamiento, pero no hay que olvidar que esto también se puede (y se debe entrenar). Y para esto es importante diseñar un entrenamiento cognitivo adaptado al deporte que practiques de forma sistemática y regular durante la semana.

Cuando un deportista trabaja por ejemplo dentro del entrenamiento cognitivo la visión, está ayudando a que la toma de decisiones sea mejor y la actuación sea de rendimiento óptimo. Esto ocurre porque la primera información sensorial que llega al cerebro es a través de la visión. El proceso es el siguiente: el ojo ve, el cerebro codifica y el cuerpo se mueve. Por tanto, aunque no se vea una relación directa, el trabajo cognitivo hace que el deportista tome mejores decisiones, se mueva antes y acierte más.

El segundo entrenamiento que hay que añadir a lo físico, lo técnico y lo táctico, además del entrenamiento cognitivo del que hemos hablado, es el entrenamiento mental. El entrenamiento mental es algo que por fortuna está cada vez mas presente el en deporte de élite, pero se utiliza en momentos puntuales o como una parte separada del resto de entrenamientos.

Cuando se logra integrar el entrenamiento mental dentro del resto de entrenamientos conseguimos:

  • Una mejor imagen del deportista, entrenador o equipo.
  • Una mejor imagen futura del deportista, entrenador o equipo.
  • Interpretar de forma correcta lo que sucede en cada momento y lo que tengo que hacer.
  • Controlar el ánimo, las emociones y los sentimientos tanto en los buenos como en los malos momentos.

El entrenamiento físico, técnico, táctico, cognitivo y mental es el verdadero entrenamiento integral moderno. Si falta alguna de las piezas el rendimiento no será óptimo y los resultados puede que no sean los esperados.