El otro día leí que en la vida (y en el deporte), era muy importante vivir con un sombrero. ¿Qué es lo que significa esta expresión? Pues simplemente que las personas, los entrenadores, los directivos y los deportistas deben ser ellos mismos y comportarse de la misma manera con todas las personas y en todos los lugares.
Es posible que te hayas encontrado con personas que viven con un sombrero en toda circunstancia y con toda la gente. E incluso que hayas experimentado lo contrario, es decir, convivir con compañeros que son muy educados y atentos con sus jefes y superiores, y que después tratan de forma desagradable y tiránica a sus compañeros o personas que tienen a su cargo.
En el deporte también ocurre esto. Hay entrenadores, jugadores, técnicos que siempre son iguales con todas las personas tratando de manera correcta y con cariño a los demás, y otros que en función de sus intereses, funciones o circunstancias van a utilizar diferentes sobreros.
Respeto a todos y comprendo que cada persona tiene un nivel de consciencia. Pero desde mi humilde opinión creo que existen verdades universales que hacen que el mundo funcione mejor y que las personas puedan desarrollarse y ser felices.
Por tanto, si tratas a los demás tal y como te gustaría que te tratasen a ti (ley universal), independientemente de su rol o estatus social e independientemente de tus intereses, seguramente experimentarías sensaciones muy positivas.
En ocasiones he escuchado a personas decir: “No borres la pizarra, que lo haga la señora de la limpieza, que para eso la pagan”. No es que vaya a hacer el trabajo de otra persona, pero si la puedo ayudar y dejar borrada la pizarra me sentiré mejor yo y habré ayudado a otra persona.
En el deporte ocurren cosas similares. Cuando un equipo termina de entrenar, hay personas que dicen: “Que lo recoja el utillero que es su obligación”. Nuevamente, si le ayudo o echo una mano seguro que no me va a pasar nada. Es más, seguro que voy a ser un ejemplo para los demás y la persona encargada del material me lo va a valorar e incluso a agradecer.
Vivir de esta determinada manera, relacionarte de forma educada y generosa conmigo mismo y con los demás, y desarrollar un determinado nivel de consciencia van a hacer que te conviertas en una mejor persona y vivirás tu vida de forma plena y satisfactoria.
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