Gestión emocional de la retirada deportiva II

¿Qué otras cosas puede hacer un exdeportista para gestionar de forma eficaz su retirada deportiva?

Disfrutar de la familia

 Parece una tontería pero los deportista de élite se pierden muchas cosas a nivel familiar cuando están en activo. Desde no poder estar en los eventos familiares, ya que la mayoría se llevan a cabo en fines de semana cuando compiten, hasta tener que pasar muchos días del año concentrados o viajando lejos de su casa y sus seres queridos.
Por tanto, cuando se retiran es momento de divertirse con la familia y los amigos. Disfrutar yendo a recoger al colegio a tu hijo, ir a ver un partido con tu padre, irte de vacaciones con tu mujer, salir con los amigos…

Todas estas pequeñas cosas harán feliz al exjugador y a su entorno.

 Aprender o iniciar hobbies

 Cuando un exjugador se retira, por regla general, sigue “necesitando” realizar ejercicio físico. No al nivel que lo hacía antes, pero si de una forma recreativa. Hay algunos que siguen practicando su deporte porque les apasiona, aunque ya no estén como cuando eran profesionales. Otros se decantan por deportes como el padel o el golf. Otros salen a correr. Pero lo importante es que tengan ese hábito saludable y un hobbie con el que entretenerse y pasar un rato con sus amigos.

Incluso hay personas que tienen otras inquietudes y comienzan a aprender un idioma, tocar un instrumento musical. No importa lo que se haga. Lo que importa es que se mantengan hábitos saludables y tener a la mente entretenida con cosas que puedan distraer y divertir.

Centrarse en el presente y no en el pasado

Tengo la fortuna de estar rodeado de personas del mundo del deporte. Gente que ha vivido muchas experiencias extraordinarias. Hay algunos que me llaman mucho la atención porque solo hablan de su época de deportista profesional. Parece que el tiempo se ha parado y que lo que están viviendo ahora es un tiempo extra que no tiene importancia.

Y no digo que recordar buenos momentos esté mal. Todo lo contrario. Lo que sucede es que hay exjugadores que únicamente hablan de cuando eran deportistas. Si hablas de una ciudad, te recuerdan alguna anécdota de cuando fueron a jugar, si hablas de algún jugador o entrenador, te lo comparan con alguien de su época, etc. Todo les recuerda a su pasado porque siguen anclados en él.

El pasado es historia, el futuro está por llegar, por tanto hay que centrarse en el presente, que es un regalo para todos nosotros y lo único que podemos disfrutar y modificar.

Cuando un exdeportista se centra en el presente, disfruta de su familia y amigos, tiene hobbies con los que se entretiene y nuevos retos personales y profesionales, está canalizando su energía de una forma óptima para poder seguir siendo feliz y disfrutar de la vida.