Coaching de equipos

 

Cuando hablamos de coaching de equipos hay que diferenciarlo en primer lugar de otros conceptos que pueden tener relación o funciones parecidas pero que no es lo mismo.

El coaching de equipos no es lo mismo que el team building. El team building o “construcción de equipos», es un término colectivo para definir un conjunto de actividades que busca formar equipos de alto desempeño y mejorar las relaciones interpersonales dentro de un grupo. Tiene la función de crear equipos, motivarles, que se conozcan mejor.

El coaching de equipos es todo lo anterior, más trabajar en torno al equipo para que se vertebre como un sistema, como una unidad, para tomar decisiones y acción. Cada miembro del equipo es un dedo, pero todos juntos forman un sistemas completo y superior que es la mano. Un dedo de forma independiente no es capaz de coger un objeto, pero la mano lo consigue y es capaz de realizar muchas más cosas y de manera más eficaz.

Como decía Phil Jackson: “Trabajando con los Bulls aprendí que la manera más efectiva para forjar un equipo ganador es apelando a la necesidad de los jugadores de conectar con algo más grande que ellos mismos (…) Crear un equipo exitoso es esencialmente un acto espiritual. Esto requiere que los jugadores renuncien a sus intereses personales por un bien mayor y así el conjunto sume más que la suma de sus partes”. (…) Buenos equipos acaban por ser grandes equipos cuando los integrantes confían los unos en los otros lo suficiente para renunciar al «yo» por el «nosotros».

Por tanto, cuando cada uno de los dedos renuncia a su “ego” y comprende que el “yo” tiene que evolucionar al “nosotros”, el equipo crecerá incluso cuando llegue el conflicto, ya que es una parte más del progreso del equipo hacia la consecución del alto rendimiento.

Cuando un equipo tiene claro su objetivo, un plan de acción, líderes (formales o informales) que trabajan para la consecución de sus metas y sus miembros trabajan como una mano y no como un dedo, se están poniendo encima de la mesa todos los ingredientes necesarios para que el equipo consiga un alto rendimiento.

La verdadera misión del coach de equipos no es únicamente dar tareas o crear dinámicas de alto impacto. Tampoco su función es cargar con el equipo para que llegue al objetivo. El coach equipos tiene la misión de crear el terreno de juego para que surja y crezca la inteligencia colectiva del equipo.