Deporte es salud

 

Se dice desde la antigüedad que deporte es salud. Pero querría añadir un matiz: Deporte es salud, casi siempre.

Como decíamos, desde la Antigua Roma, en el siglo II, el poeta romano Juvenal en sus “Sátiras” decía eso que ha quedado para la posteridad de: “Mens sana in corpore sano”.

En la Roma imperial la frase era tomada como una broma. En su origen la frase tenía el sentido de la necesidad de orar para disponer de un espíritu equilibrado en un cuerpo equilibrado. En la actualidad, el sentido que se le da es el que todos conocemos: «mente sana en un cuerpo sano«, siendo utilizada de forma académica, científica, incluso pedagógica. También se utiliza la expresión tanto en el mundo del deporte, como en el de la salud, ya sea física o mental, para indicar la necesidad de cuidarnos en ambos conceptos ya que tiene beneficios para la persona.

Si una persona tiene una alimentación equilibrada, y hace un correcto ejercicio físico regular conseguirá reducir el riesgo cardiaco y del colesterol, prevenir los problemas respiratorios, prevenir la osteoporosis y mejorar la calcificación de los huesos, mantener y mejorar la flexibilidad, aumentar la masa muscular, mejorar la postura y el tono muscular, aumentar la inmunidad ante enfermedades, reducir el sobrepeso, disminuir los problemas de diabetes, …

Además, en el apartado mental, el ejercicio físico puede ayudar a aumentar la autoimagen y la confianza de la persona, así como la producción de hormonas que generan bienestar, endorfinas, que aumentan la sensación de bienestar y disminuyen el estrés mental.

Todo esto hace que la persona se sienta con más energía, pueda rendir más en sus actividades diarias y descansar y dormir mejor.

Hasta aquí, podríamos decir que el ejercicio físico y el deporte es salud, o que, gracias al deporte, las personas pueden aumentar y mejorar su bienestar físico y mental.

El problema es que cuando una persona comienza a realizar un ejercicio físico o deporte por encima de sus posibilidades o al más alto nivel, el bienestar tanto físico como mental deja de ser tal.

Como sabemos el deporte de alto rendimiento no siempre conlleva salud física y mental por sus exigencias y características. Pero, ocurre igualmente en el deporte amateur. Todos conocemos personas y gente cercana que después del trabajo entrenan o se preparan, incluso de forma obsesiva para una prueba o en su deporte. Esto les provoca lesiones, malestar e incluso se ven afectados mentalmente. Por tanto, como decíamos al inicio, el deporte es salud, casi siempre. Es decir, no siempre el deporte y el ejercicio físico está vinculado a la salud, y en ocasiones puede conseguir lo contrario si no se hace de una forma adecuada.

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